Ivar Slik, de 30 años, hizo del ciclismo su pasión desde el mismo momento en que se subió a la bicicleta de niño. Después de diez años en la carretera como corredor continental y pro continental, decidió comprometerse con algo nuevo, uniéndose al Wilier Triestina Factory Gravel Racer.
Tras unos primeros años en los que combinó la competición en carretera y ciclismo de montaña, se unió a algunos equipos profesionales con los que tuvo la oportunidad de empezar su carrera profesional y de correr clásicas famosas, como la Vuelta a Flandes y otras carreras del World Tour, antes de lanzarse a las carreras de playa a lomo de su mountain bike, donde se proclamó campeón de Europa en 2021, para finalmente aterrizar en el mundo del gravel.
En 2022, Ivar ganó la Traka Gravel Girona y se convirtió, por gloria suya, en el primer ganador no estadounidense de la Unbound 200. Un logro histórico conseguido junto con su Rave SLR.